
Información Sobre la Manipulación de Alimentos como Frutas.
16.08.2024

1. Selección de Frutas
- Compra frutas frescas: Elige frutas que estén maduras, firmes, y sin signos visibles de deterioro como magulladuras, moho o manchas.
- Revisa la frescura: Para frutas como melones o piñas, verifica el aroma para asegurarte de que estén maduras. Para cítricos, busca frutas pesadas para su tamaño, lo que indica que están jugosas.
2. Limpieza y Lavado
- Lavado antes del consumo: Lava todas las frutas, incluso las que no se comen con cáscara (como naranjas y plátanos), bajo agua corriente antes de comerlas o prepararlas. Esto ayuda a eliminar posibles contaminantes de la superficie.
- Uso de cepillos suaves: Para frutas con piel dura como manzanas, melones y pepinos, usa un cepillo suave para limpiar la superficie.
- Evita el uso de jabones: No uses jabón, detergentes, ni lejía para lavar las frutas, ya que estos productos pueden dejar residuos que son peligrosos para la salud.
3. Almacenamiento de Frutas
- Frutas refrigeradas: Algunas frutas, como las bayas, uvas, y manzanas, deben refrigerarse para mantener su frescura. Mantén el refrigerador a una temperatura de 4°C o menos.
- Frutas a temperatura ambiente: Frutas como plátanos, aguacates, y cítricos se pueden almacenar a temperatura ambiente hasta que maduren. Una vez maduras, muchas de ellas se conservan mejor en el refrigerador.
- Separación de frutas: Almacena frutas como manzanas y plátanos lejos de otras frutas y verduras, ya que producen etileno, un gas que acelera la maduración y puede hacer que otros productos se deterioren más rápidamente.
4. Manipulación Durante la Preparación
- Corte adecuado: Usa cuchillos limpios y tablas de cortar designadas solo para frutas para evitar la contaminación cruzada con otros alimentos, como carnes crudas.
- Preparación rápida: Corta las frutas justo antes de su consumo para evitar la pérdida de nutrientes y la oxidación. Si cortas frutas con anticipación, almacénalas en recipientes herméticos en el refrigerador.
- Uso de limón para evitar oxidación: Aplica jugo de limón en frutas como manzanas o peras después de cortarlas para prevenir que se oscurezcan debido a la oxidación.
5. Conservación y Almacenamiento a Largo Plazo
- Congelación de frutas: Si deseas almacenar frutas durante un período prolongado, puedes congelarlas. Lávalas, sécalas bien, y colócalas en una bandeja para que se congelen individualmente antes de guardarlas en bolsas herméticas.
- Deshidratación: La deshidratación es otra técnica de conservación, especialmente útil para frutas como manzanas, mangos y plátanos. Usa un deshidratador o el horno a baja temperatura para eliminar el agua de las frutas.
- Conservas y mermeladas: Las frutas también se pueden convertir en conservas o mermeladas para su almacenamiento a largo plazo. Asegúrate de seguir métodos de conservación adecuados para evitar el crecimiento de bacterias.
6. Manipulación Segura
- Evita la contaminación cruzada: Usa utensilios y superficies limpias cuando manipules frutas. No utilices los mismos cuchillos o tablas de cortar para frutas que para carnes crudas sin limpiarlos adecuadamente entre usos.
- Lavado de manos: Lávate las manos antes y después de manipular frutas para evitar la transferencia de contaminantes desde las manos a la comida.
7. Revisión de Frutas Almacenadas
- Inspección regular: Revisa las frutas almacenadas regularmente y retira aquellas que estén empezando a deteriorarse, ya que una fruta podrida puede acelerar la descomposición de las demás.
- Uso de frutas maduras primero: Consuma primero las frutas más maduras para evitar el desperdicio.
8. Consumo Seguro
- Frutas listas para comer: Algunas frutas, como las fresas y uvas, deben lavarse justo antes de su consumo, ya que el lavado y almacenamiento posterior pueden acelerar su deterioro.
- Almacenamiento de frutas cortadas: Las frutas cortadas deben almacenarse en recipientes herméticos en el refrigerador y consumirse en un plazo de 2-3 días para asegurar su frescura.